Si tuviese que definir estas jornadas postelectorales con una sola frase, creo que resultaría bastante adecuada una referencia a las “líneas rojas” que todos los partidos y coaliciones manifiestan tener.
Albert Rivera, pese a no definirlo así, parece que tiene como línea roja un hipotético apoyo a la investidura a Mariano Rajoy, y ello pese a reconocer que con los resultados en la mano lo más lógico es que sea el P.P. el que forme gobierno y del riesgo que para el pais supondría un gobierno formado por un gran frente de izquierdas.
Por su parte, Podemos y sus coaligados marcan como “líneas rojas” la necesidad de llevar a cabo un referendum en Cataluña que ponga de manifiesto la posición de esa ciudadanía respecto de la independencia de España. Y la primera pregunta que a cualquiera se le ocurre es ¿solo en Cataluña? y si el resultado es una mayoría partidaria de la independencia ¿se va a posibilitar llevarla a cabo? No son estas las únicas líneas rojas, también han manifestado que su objetivo principal es evitar que Mariano Rajoy y más ampliamente el P.P., puedan gobernar. ¿Es que ven mas factible la consecución de sus objetivos desintegradores con un gobierno del PSOE?
Y que pasa con el PSOE, ¿la única limitación que establecen para formalizar pactos con Podemos es su renuncia al referendum por la independencia en Cataluña? ¿Ese es a su juicio el único riesgo que conllevan los pactos con esta fuerza política? ¿Tan pronto se han olvidado de los verdaderos objetivos que se han propuesto? ¿De cual es su ideología antisistema? ¿De cuales son los modelos Bolivarianos que veían convenientes para nuestro país y otros vecinos del sur de Europa?
¿Se imaginan ustedes que ocurriría si ante la renuncia a la convocatoria del referendum se constituye un gobierno PSOE-Podemos y los independentistas catalanes continuan con su hoja de ruta y su insumisión? ¿ Quién iba a poner en marcha el 155 de la Constitución? ¿Quién iba a detener la desintegración del pais?
El mejor escenario a que puede aspirar un “antisistema” es a formar parte del gobierno. La desintegración está garantizada y promovida desde dentro, mucho más. Y los de Podemos, o al menos sus dirigentes, se han definido como tales en numerosas ocasiones y negar que gran parte de los seguidores lo son también es cerrar los ojos a una evidencia.
Y Europa ¿sería capaz de soportar otro envite como el de Grecia pero de una envergadura mucho mayor? Y si lo es, ¿estará dispuesta a afrontarlo o preferirá evitar los mayores problemas dejándonos fuera?
Teniendo en cuenta que todo esto es del conocimiento de nuestros políticos, no puedo evitar el pensar que detrás de este deseo de pacto lo que existe es una ambición desmedida por llegar a la Moncloa, por parte de Pedro Sánchez y sus allegados, conscientes por otra parte, de que con los resultados cosechados les resultará muy dificil disponer de otra oportunidad.
Y por último, si el P.P. no consigue formar gobierno, ni la gran coalición que muchos ven conveniente, ni forzar otras elecciones, y finalmente la pelota pasa al PSOE, consciente de la gravedad que conlleva el pacto PSOE-Podemos, debería ser capaz de brindar al PSOE la posibilidad de formar un gobierno en minoría sin esas graves hipotecas y tratar de mediar y colaborar en el sostenimiento de nuestro pais.
Que el PSOE acepte esa opción ó no ya es cosa suya.
Cualquier cosa antes que lanzarnos al abismo.
José Antonio Virto
TERUEL.